Nace esta página de mi blog de un impulso.
No hay tema más grande, ni esencia más pura que la del mismo amor. Todo lo puede, dicen. Tal vez. Lo que es seguro es que todo lo mueve.
Doy comienzo, por tanto, a esta página movida por mi yo más íntimo e impulsada por el amor más grande que he conocido: mi madre, quien me hace llegar la primera de dichas cartas de amor.
CARTA DE AMOR I
Albert Einstein
CARTA DE AMOR II
0 comentarios